Más de 520.000 ciudadanos metropolitanos de Barcelona viven en zonas muy vulnerables al calor

Son datos del estudio "El calor en un futuro: Índice de vulnerabilidad al cambio climático (IVAC)", elaborado por el Instituto Metrópoli y financiado por el AMB

28/07/2023

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El 16% de la población metropolitana (cerca de 526.000 personas) vive en zonas con muy alta vulnerabilidad al cambio climático. El estudio El calor en un futuro: Índice de vulnerabilidad al cambio climático (IVAC), elaborado por el área de Sostenibilidad Urbana del Instituto Metrópoli y co-coordinado y financiado por el AMB, identifica las áreas del territorio y grupos sociales más vulnerables a estos fenómenos. Lo hace gracias a la creación del primer Índice de Vulnerabilidad en el Cambio Climático (IVAC) en el área metropolitana de Barcelona, ​​que dibuja un mapa a una escala muy precisa (sección censal).

La investigación identifica los puntos con mayor vulnerabilidad, teniendo en cuenta el estado actual y el futuro aumento de las temperaturas extremas y de las oleadas de calor. Cuanto mayor es la puntuación IVAC, más vulnerable es la zona al cambio climático. 

Distribución de las zonas de alta vulnerabilidad climática

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Las zonas más vulnerables se encuentran principalmente en los 9 municipios con mayor densidad de población, como Santa Coloma de Gramenet, Sant Adrià de Besòs, L’Hospitalet de Llobregat, Badalona, ​​Cornellà de Llobregat y algunos distritos de Barcelona como Nou Barris, Ciudad Vella y Sants Montjuïc, que presentan los índices de vulnerabilidad más elevados.

En el Eix Besòs, las áreas más vulnerables se encuentran en los barrios badaloneses de la zona de Llefià, San Cristo de Can Cabanyes, San Roque o la Salut. En Santa Coloma de Gramenet, el barrio con mayor vulnerabilidad es Fondo. Y Sant Adrià del Besòs, especialmente el barrio de la Mina.

En el Eix Llobregat, destaca L’Hospitalet de Llobregat con varios barrios que incluyen zonas muy vulnerables, como la Torrassa, la Pubilla Casas, la Florida, Les Planes, Collblanc o Bellvitge, entre otros. En Cornellà de Llobregat, el barrio de Sant Ildefons. En Esplugues de Llobregat, alguna zona de Can Vidalet.

En la ciudad de Barcelona, ​​se encuentran en los barrios de los distritos de Ciutat Vella (El Raval o la Barceloneta), Nou Barris (zonas extensas de Ciudad Meridiana, la Prosperidad o el Turó de la Peira), Sants-Montjuïc (Sants-Badal, Sants o el Poble Sec), Sant Martí (el Besòs y el Maresme), Sant Andreu (la Trinitat Vella), Horta-Guinardó (el Carmel y alguna zona de Can Baró) o Gràcia (la Vila de Gràcia).

¿Qué hace que una zona sea vulnerable al cambio climático?

Son zonas con poca presencia de verde y elevada densidad residencial, con predominio de hogares con rentas bajas y sin estudios universitarios, de hogares con personas mayores que viven solas, de hogares con mujeres mayores, de población extranjera proveniente de países en desarrollo y de hogares vulnerables con informes de riesgo de exclusión residencial de servicios sociales. Además, son áreas con viviendas relativamente viejas (construidas principalmente de 1951 a 1980) y con una mayor proporción de edificios en estado deficiente, mal estado o ruinoso.

Por otro lado, el estudio apunta que algunos de los factores que ayudan más a reducir esta vulnerabilidad son la abundancia de zonas verdes urbanas, así como la presencia de viviendas de nueva construcción, especialmente aquellas realizadas después de 2007.

La influencia marítima también tiene gran importancia: algunos barrios del frente marítimo de Barcelona, ​​Badalona y Sant Adrià del Besòs, a pesar de tener un IVAC alto, carecen de proyecciones tan elevadas de aumento de las temperaturas diurnas y, por tanto, serán zonas menos vulnerables que otros barrios interiores de Barcelona con características sociales y de edificación similares.

Vulnerabilidad al calor y los refugios climáticos

La superposición del IVAC con la actual Red Metropolitana de Refugios Climáticos (XMRC) muestra que la cobertura actual de refugios climáticos está cubriendo ya casi la totalidad de las zonas de alta vulnerabilidad.

Este verano 2023, un 80% de la población metropolitana vulnerable (excepto Barcelona) está a 10 minutos de un refugio climático metropolitano y el 96% a 15 minutos. La XMRC ha incrementado notablemente su cobertura, pasando de los 20 refugios en verano de 2021 a los 74 refugios este verano de 2023.

Así, el IVAC ha sido la herramienta para dirigir la ampliación territorial de la XMRC. Actualmente, 7 de los 9 municipios con población extremadamente vulnerable forman ya parte de la XMRC.

Claves para el diseño de políticas para reducir la vulnerabilidad climática

La investigación hace una relación de propuestas para garantizar ciudades más adaptadas al aumento de episodios de calor extremo, que ya hemos empezado a vivir:

  • Promoción del verde urbano y protección de los espacios naturales (actuaciones a corto y medio plazo)
  • Promoción de infraestructura azul (fuentes, puntos de agua), o intervenciones en azoteas, paredes y pavimentos (cubiertas verdes, pavimentos claros)
  • Rehabilitación energética de las viviendas
  • Políticas de bienestar social para reducir desigualdades, sobre todo en lo que respecta al acceso a agua y energía, incluyendo puntos de asesoramiento energético
  • Aumento de la cobertura de los refugios climáticos
  • Promoción de las comunidades energéticas que promueven instalaciones de energías renovables de proximidad

El AMB ya está llevando a cabo varias de estas políticas de adaptación al cambio climático, para paliar cuanto antes estos efectos adversos.

Algunos ejemplos son la expansión, año tras año, de la red metropolitana de refugios climáticos, que en 2023 se ha ampliado hasta 74 espacios. Por su parte, el Plan de barrios del AMB también contempla la habilitación de refugios climáticos. Otro ejemplo es la línea de ayudas para la rehabilitación energética del parque metropolitano de viviendas. Esta convocatoria de subvenciones, gestionada por el Consorcio Metropolitano de la Vivienda, está dotada con 100 millones de euros de los fondos europeos Next Generation, y espera rehabilitar 13.650 viviendas en cuatro años, que beneficiarán a hasta 35.000 personas.

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